Lucir bellas y hacer que se sientan seguras de sí mismas es uno de los principales objetivos que nos marcamos en nuestro día a día. Sin embargo, para que la intervención de aumento de pecho sea un completo éxito, es necesario tener en cuenta una serie de pautas postoperatorias. Uno de los cuidados y acciones imprescindibles tras una intervención de estas características es el uso de un sujetador postoperatorio que permita mantener una sujeción suficiente de la zona mamaria. En el siguiente post desvelaremos las características a tener en cuenta de un sujetador postoperatorio.
¿Qué sujetador es el más recomendable tras un aumento de pecho?
El sujetador postquirúrgico ideal debe de cumplir con los siguientes requisitos básicos:
- No debe tener aros.
- El sujetador debe ser de color oscuro, ante posibles manchas inesperadas. Deberás disponer, a su vez, de 2 modelos de recambio.
- Tiene que ser cómodo, a la vez que tiene que permitir fijar el pecho de forma firme, al igual que lo hacen unas mallas.
- Debe contar con un cierre delantero. Evita en todo momento los modelos que no cuenten con cierre.
- Selecciona correctamente la talla de tu sujetador. Se deberá hacer un especial énfasis a la copa y la talla de dicho sostén.
- Di adiós a las costuras. Estos sujetadores deben tener los bordes suaves y no llevar costuras en las copas. Con ello evitaremos que las cicatrices vayan a más.
- Es conveniente utilizar sujetadores de copa entera, ya que cubrirán el pecho en su integridad. Es por ello por lo que la banda inferior se debe ajustar cómodamente al tórax de la paciente.
¿Cuánto tiempo tengo que llevar puesto el sujetador postoperatorio?
El sujetador postoperatorio debe ser utilizado durante las 6 semanas posteriores a la intervención, las 24 horas del día, pudiendo retirarse durante la primera semana una vez la paciente lo deseé para ducharse. En la 2ª y 3ª semana podrá optar por no llevarlo durante unas horas y utilizar otro sujetador similar (deportivo, sin aros).
Finalmente, pasados los 3 primeros meses, la paciente podrá dormir sin él. Será necesario, eso sí, comprobar que la cicatrización alrededor de la zona intervenida es suficiente para evitar desplazamientos.
Como habrás podido comprobar, una mamoplastia de aumento implica una serie de cuidados que no podemos pasar por alto. Es importante que durante el proceso la paciente se sienta segura e informada en todo momento. En Clínica Zurich cuidamos la salud de todas ellas gracias a un equipo profesional y humano que lo hace posible. ¿Necesitas más información sobre los tratamientos con los que contamos? No lo dudes y ponte en contacto con nosotros.
