La presoterapia es una técnica que utiliza la presión del aire, ya sea negativa con el uso de ventosas o positiva con la utilización de cobertores, para realizar tratamientos estéticos que también resultan beneficiosos para la salud en general.
No es una terapia nueva aunque su continua evolución, desde sus inicios hasta la fecha, hace que siga siendo muy bien considerada en el tratamiento de diferentes trastornos o patologías.
¿Qué hace la presoterapia corporal?
El objetivo de esta técnica es el drenaje linfático profundo de cara a facilitar la eliminación de líquidos, grasas y toxinas que se acumulan en el organismo y son causa, en un alto porcentaje, de la temida y frecuente piel de naranja.
Esta se origina por la acumulación de grasa en forma de nódulos en algunas zonas del cuerpo como los muslos o el abdomen y está estrechamente relacionada con la celulitis. Dado su origen, y junto con otros tratamientos, la presoterapia es una de las mejores maneras de eliminarla.
Es una técnica indolora y sin efectos secundarios, aunque no está recomendada en algunas situaciones con lo cual la evaluación de un especialista se hace imprescindible antes de someterse a ella.
¿Cuáles son los beneficios de la presoterapia corporal?
Además del ya citado relativo a la piel de naranja aporta otros muchos beneficios tanto si lo que se busca es un coadyuvante al tratamiento de patologías clínicas como si lo que se quiere es un remedio meramente estético.
En los casos de hipertensión al reactivar el sistema circulatorio ayuda a bajar la presión arterial, ya que elimina algunos de los obstáculos, como líquidos acumulados, que la fuerzan haciendo que suba.
Cuando tras un traumatismo, o una operación, se producen edemas esta técnica puede ser de ayuda para su eliminación y mejora en la recuperación de la zona dañada. Esto debe hacerse siempre bajo prescripción médica, puesto que no siempre es aconsejable.
También resulta muy beneficiosa en los casos de falta de movilidad y en los de sedentarismo, ya que ambas empeoran la circulación de la sangre y provocan molestias e hinchazón en las extremidades inferiores que repercuten en la calidad de vida.
Beneficia también al sistema inmunológico, puesto que fortalece las defensas al mejorar el estado general del organismo y sobre todo por la mejora de los sistemas circulatorios sanguíneos y linfáticos.
Su uso en sesiones de fisioterapia deportiva está cada vez más extendido a modo de prevención de lesiones y de relajación post entrenamiento dada su eficacia y al no requerir de medicación alguna para usarla.
Resulta también muy eficaz en los tratamientos de pérdida de peso, ya que evita la retención de líquidos acentúa la pérdida de volumen y esto es un importante refuerzo psicológico a la hora de tener que realizar dietas muy largas y restrictivas.
¿Cuántas sesiones de presoterapia son aconsejables para que haga efecto?
Es recomendable realizar dos o tres sesiones semanales en un período de tres meses para comenzar a ver los resultados, aunque esto al no ser una ciencia exacta variará en función del paciente y de la máquina utilizada.
Aunque existen máquinas domésticas de presoterapia los resultados no tienen comparación con las profesionales ni aportan su versatilidad y seguridad de empleo.
Este tipo de aparatología de presión siempre debe ser manejado por personal cualificado para evitar fallos, que no siendo graves, pueden interrumpir el tratamiento al que apoyen o sencillamente no servir para nada.
Este tratamiento aporta infinidad de beneficios al organismo, pero no es a veces la mejor opción si por ejemplo se está embarazada o se padece de varices profundas. En Clínicas Zurich podemos asesorarte sobre su empleo y, como siempre, prestarte un tratamiento totalmente personalizado.