Este año el invierno llega “oficialmente” el día 22 de diciembre, aunque, en muchos lugares de España ya se ha podido vivir el clima correspondiente a esta estación. Esto implica que el realizar un cambio en nuestra rutina facial sea algo inevitable, ya que cada estación requiere de diferentes cuidados.
Las bajas temperaturas suponen una mayor exposición a los efectos secantes provocados por la calefacción, la aparición de escamas en la piel fruto de los vendavales o los poros llenos de grasa por una gran falta de exfoliación.
Nuestros expertos en Clínicas Zurich os traen hoy 6 formas de llevar una rutina facial perfecta para el invierno. El verano, aunque parezca que quede mucho, llega más rápido de lo que pensamos, y no queremos acudir a todos los eventos sin tener la piel estupenda.
1. Decídete por un cambio de limpiador
No podemos usar los mismos limpiadores faciales para todas las estaciones del año. Al tratarse de una estación con un clima más seco y hostil debemos de evitar aquellos que sean muy espumosos ya que pueden tener un efecto agresivo en la epidermis.
En vez de realizar la limpieza completa tanto por la mañana como por la noche, opta por un buen lavado de cara con agua por la mañana. Y, seguir por la noche con tu rutina habitual.
Los aceites limpiadores (los que se vuelven como un fluido lechoso cuando los emulsionas con agua) son otra opción perfecta debido a que logran eliminar todo el maquillaje y la suciedad de manera más efectiva que un gel limpiador.
2. Sigue exfoliando tu piel
La exfoliación es más habitual en verano, ya que debido al calor y al sudor la piel se ve más congestionada. Pero eso no quita que se trate de una rutina necesaria en invierno.
Es cierto que no es necesario realizarlo con la misma frecuencia que en verano, ya que la piel está más sensible. Se suele recomendar entre una o dos veces por semana, para así eliminar las células muertas y logramos que los productos penetren mejor por los poros.
Un ingrediente natural y sorprendente que nos conviene buscar al comprar un exfoliante es el arroz. Debido a su delicadeza y sus propiedades conseguimos eliminar las células muertas y dejar el rostro suave y sin irritación.
3. Protección contra los rayos UVB
Debes de saber que los rayos UVB no desaparecen por completo en invierno, por eso es necesario que sigas usando una protección alta, con cremas que al menos tengan un SPF 30, ya que los rayos UBV aún pueden penetrar en la piel y causar daños.
4. Usa las mascarillas
La deshidratación e irritación causada por la llegada del frío hace que la piel esté sedienta. Implica que los nutrientes tengan dificultades a la hora de penetrar en la piel, que está tirante, seca y puede presentar descamación.
Un consejo que quizás no sabías, las mascarillas que contienen mayor cantidad de ácido hialurónico son las mejores, y, lo mejor es aplicarse la mascarilla una vez realizada la exfoliación, de esta manera penetra mejor en la piel.
5. Productos Hidratantes
Se trata de uno de los pasos más importantes. Los productos hidratantes es algo que debemos cambiar con el cambio de verano a invierno, permitiéndonos mezclar para añadir variaciones y darle a la piel lo que nos pide.
Hay que saber escuchar a la piel y ajustarnos a lo que necesita. Por ejemplo, incorporando un sérum hidratante a nuestra rutina diaria de mañana y noche será ideal. El ácido hialurónico es un ejemplo muy efectivo, ya que retiene el agua y la textura es muy ligera.
6. Indiba Deep Care Facial
Se trata del tratamiento de neotecnocirugía que ha dado con la fórmula para tener la piel joven por más tiempo. Este tratamiento de radiofrecuencia monopolar revitaliza la piel, suaviza líneas de expresión, reduce y ralentiza la aparición de flacidez e hidrata el rostro. Desde la primera sesión la piel luce un aspecto más jugoso y con brillo. Además de trabajar la calidad general de la piel del rostro, reduce las bolsas y ojeras.